Cocina tradicional catalana es el tema en este espacio de diseño contemporáneo, el Petit Comité , que sirve durante todo el día desde el mediodía hasta la medianoche.

          Los mejores chefs locales han comenzado a seguir adelante ... o hacia atrás, como volver a los platos tradicionales de la cocina catalana, reinventando clásicos con una gran materia prima y técnicas de mejora, el tratamiento de su paladar a las nuevas especialidades de antiguas recetas como los huevos escalfados, rellenos de cebolla empanizados y platos tradicionales como trinxat(col picada con patatas y bacon) o Canelones amb bechamel de tòfona (canelonni con bechamel trufada) o el postre tradicional como mel i mató (queso fresco y miel), crema catalana, peras al vino tinto y el chocolate con churros.

          Es sólo la comida rústica, sin embargo - el interior está bien puesto al día y mantiene el resto de sus sentidos con firmeza en un ambiente moderno y cosmopolita.

          Este restaurante es el intento a un público menos elitista, sirviendo a las versiones más asequibles de los clásicos catalanes.

          Los platos son pequeños y la intención es de pedirlos a la misma manera que las tapas.